AYUDA FRENTE A LAS INUNDACIONES
(CNAS Perú) Las fuertes y constantes lluvias en la región Madre de Dios, Perú, produjeron el desbordamiento de los ríos Tambopata, Madre de Dios e Inambari, trayendo como consecuencia la inundación de 3627 viviendas, de las cuales 3447 quedaron sin servicios de agua potable y energía eléctrica, así lo informó el gobernador regional de Madre de Dios.
Al enterarse de lo acontecido, a través de un mensaje de WhatsApp enviado Lila Ventura, encargada de una obra de la Iglesia del Nazareno en el centro poblado El Triunfo, la pastora Susana del Aguila, coordinadora de MNC del distrito Perú Sur, coordinó con el superintendente de distrito acciones concretas de ayuda para los damnificados del lugar donde la Iglesia tiene incidencia.
Se realizó el levantamiento de una ofrenda entre las iglesias del distrito, también, la recolección de ropa y la compra de víveres que fueron entregados por los miembros de la Iglesia del Nazareno en el Triunfo.
Lili ventura cuenta que el 21 de febrero, el Río Madre de Dios salió de su cause, inundando gran parte del centro poblado El Triunfo. Muchas de las familias quedaron atrapadas en sus casas, siendo rescatadas en botes y luego hospedadas en colegios, que se han convertido en refugios temporales.
La ayuda que se viene dando es un esfuerzo conjunto entre los coordinadores de MNC locales, pastores y los responsables de la obra en el triunfo. Son alrededor de 70 familias en el sector El Triunfo que están siendo beneficiadas. Celia Osorio Soto de 40 años, es una madre de seis hijos, en su casa vivían 8 personas, cuenta que lo acontecido fue muy terrible e inesperado, se sintió desesperada al ver sus cosas flotando y no poder hacer nada, “Saqué a mis hijos y perdí mis cosas, mi casa está hecha un desastre”, dice.
Como ella son miles los afectados, que en muchos casos lo han perdido todo. La autoridad regional de Madre de Dios también informó que un sector golpeado severamente es la agricultura, 791 familias dedicadas a la siembra fueron afectadas en las tres provincias de la región.
Silvia Mantilla Clemente de 32 años, madre de una hija, en su casa viven cuatro personas y dice que cuando se produjeron las inundaciones no sabían como reaccionar ya que llegó de repente y no estaban preparados. Ella se muestra esperanzada, “superar todo lo que ha pasado y agradecer a Dios, que hoy en día, nosotros estamos con vida”, dice. También cuenta que en el sector donde vive no tienen el servicio de agua potable ni energía eléctrica, y el camino que da acceso a su sector está destruido.
Aún existen muchas necesidades como ropa, sábanas, colchones, mosquiteros y medicina, pero Lila se muestra optimista y dice que continuarán orando para que Dios toque corazones para seguir proveyendo la ayuda, no solo material, sino también espiritual. Ella testifica: “La ayuda ha impactado en la vida de las personas, al mostrar que la Iglesia del Nazareno si se preocupa y está preparada para ayudar en los momentos difíciles”.
Tanto Silvia como Celia están muy agradecidas con los hermanos y la iglesia por la Ayuda recibida. Celia dice, “ya tengo un poquito de comida para poder darles a mis hijos y gracias a todos los hermanos que están apoyando”, también se muestra esperanzada de salir adelante, “Sí, tengo mucha esperanza, con la ayuda de Dios yo sé que vamos a salir adelante todas las familias que hemos sido damnificadas”.
Fuente: Ministerios Nazarenos de Compasión